Capitulo 9

     El tiempo pasaba y tenia que pensar en un plan para acercarme a Kilian y quitarle
     la maldita cura.No soy una asesina,ni siquiera he matado a una miserable mosca
     estoy limpia de cualquier pecado y no pienso ensuciarme las manos por un lunático
     que quiere que algún que otro desecho humano desaparezca de su vista.Si quiere
     matarlos que lo haga el solito.
     Me da vergüenza reconocerlo pero al principio en un minuto de desesperación
     realmente me plantee hacerlo.Es increíble como la vida de alguien puede cambiar en
     cuestión de segundos.Justo cuando pensé que mi vida no podría ser peor Kilian me
     demuestra una vez mas que me equivocaba.Me da asco solo de pensarlo pero aunque
     duela reconocerlo la verdad es la verdad.Tengo miedo de decírselo a mi hermana
     porque se que es capaz de hacer una locura y no quiero perderla a ella también.
     Si alguna de nosotras tiene que sobrevivir me alegro que sea ella,se lo merece,se
     merece encontrar la felicidad y vivir una vida normal como la que yo deseo en estos
     momentos.Luego esta ese idiota de Loke. Estoy seriamente preocupada por él.
     A parte de no tener vida propia y de seguirme a todas partes,ha empezado a gustarme
     y eso me asusta,me aterra,me da pánico.Es extraño pero cuando estoy con él todo
     cambia.Mis problemas,mi rabia desaparecen en un instante.Cuando se acerca a mi,mí
     corazón comienza a latir como un loco,me sonrojo con facilidad y lo peor de todo
     es que tiene como un poder mágico para meterse en mi cabeza y hacer que le cuente
     todo lo que quiere saber.Reconozco que siento cierta debilidad o atracción por él.
     En verdad no se lo que siento y eso me vuelve loca.Cuando le veo me dan ganas
     de saltar encima de él y besarle pero en cuanto abre la boca y dice una de sus
     estupideces me dan ganas de arrearle una buena.Estoy confusa quiero contarle mi
     problema pero no quiero involucrarlo.
     -¿En qué estas pensando?-La voz suave de Loke me estremeció
     -Nada-Suspire.
     -¿Cuántos años te crees que tengo?
     -Cosas mías,personales,que no debe saber cualquier idiota.
     -Menos mal que yo no soy idiota-Dijo sonriendo.
     -Supongo.
     Nos quedamos en silencio.Yo le miraba a él y él miraba fijamente la carretera.
     Cinco minutos después el coche freno bruscamente.
      -Baja.
      Sin rechistar obedecí, en ese instante no me apetecía una pelea.Se acerco a mi, me
      cogió de la mano y abrió la puerta trasera del coche.Me tiró en el asiento de atrás
      y acto seguido entro él.Me tenia atrapada no podía moverme y menos salir del coche.
      Por estar en mi mundo ni siquiera me di cuenta de que me había llevado fuera de la
      ciudad. Estábamos en medio de la nada,aunque gritase nadie podría oírme.
      -¿Te has vuelto loco?¿Qué haces?¡Bájate de encima!
      -¿Por qué?Yo estoy muy cómodo.-Esta vez su sonrisa fue perversa
      -No lo dudo pero yo estoy incomoda.-En realida no lo estaba.Me gustaba esa
      extraña situación y quería que continuase-Así que,¡bájate!
      -¿Y sí no quiero?
      -¿Qué es lo que quieres?
      -A ti.-Sus labios rozaron mi cuello lentamente.
      -Pues tenemos un problema porque yo quiero irme a casa.
      -¿De verdad?-Esta vez sus labios subieron hasta mi barbilla
      -Si.-Aunque dude de mi respuesta,no sonó muy convencida.
      -Te llevare con una condición.
      -¡¡OOO!!Que sorpresa.¿Qué es esta vez?Que me quede en tu casa otra vez,
      o esta vez quieres quedarte tu en la mía,o tal vez quieres que echemos un polvo
      porque estés muy necesitado.
      -Hmmm...Tentador,me lo pensare,pero antes de eso quiero decirte algo.
      -¿Qué cosa?
      Acerco su rostro al mio lentamente,giro mi cabeza y me dijo al oído:
      -A partir de ahora yo seré el único hombre en el que pensaras.Tus labios solo
      pueden tocar los míos.
      -¿Cómo dices?-Para mi sorpresa,lo que me dijo me reconforto.
      -¿Entendido?-Preguntó y me beso,esta vez en los labios.Eran tan dulces.
      -Entendido.-Conteste sin oponer resistencia.Lo que sucedió después podéis
      imaginarlo,pues no tengo palabras para explicarlo.
     
   
   

   

Capitulo 8

   El coche paro en frente de una pequeña cafetería.En cuanto nos bajamos
   del coche Loke se acerco a mi,me puso un brazo sobre el hombro,tiro
   de mi hacia el como si fuera de su propiedad y comenzó a sonreír.
   -¿Que haces?-Le pregunte.
   Al ser mas alto que yo,tuvo que agacharse para que su frente se pegara
   a la mía y decir;
   -¿Es que no te gusta que te traten así?
   -Yo no he dicho eso.-dije yo mientras me ruborizaba.
   -Entonces no hay ningún problema en que te coja de esta manera,verdad?
   -Pero entonces todos pensaran que estamos saliendo juntos.
   -¿Y?Cual es el problema?
   Me quede sin replicas.Ya no podía decirle nada.Entramos en la cafetería.
   Una camarera de unos treinta años nos tomo nota.Yo había pedido un
   Caramel Machiato,mientras que el pidió un café solo.
   -¿Y...?¿Dónde ibas?-Dijo mientras tomo un sorbo del café.
   -Eso a ti no te importa.-Le dije yo en tono frio y distante.No podia decirle.
   que estaba infectada.Tampoco iba a decirle que iba a convertirme en una
    asesina.
   -Que mala eres.Haber si adivino,¿ibas a una cita con tu novio?
   -¡¿Qué?!-Dije sorprendida por su pregunta.-¡No!Yo...¡No!No tengo novio.
   -No me lo creo.-Dijo después de tomar otro sorbo de café.
   -Y que puedo hacer yo si tu no te lo crees.-Dije con voz triste mientras bajaba
   la cabeza.Saqué cinco dolares de mi bolsillo y los deje en la mesa.-Esto es por el
   café.-Le dije señalando el dinero.-Lo siento me tengo que ir.Adiós.
   El se me quedo mirando con cara sorprendida,después sonrió.Era muy guapo.
   En cuanto le vi sonreír di media vuelta y salí de la cafetería.Estaba claro que se
   estaba burlando de mi por ser una solitaria.
   -¡Que idiota eres Karen!-Me dije a mi misma en cuanto salí por la puerta.
   Al otro lado de la calle había un taxi libre.Decidí cogerlo para llegar hasta el centro,
   pero una mano me impidió abrir la puerta.Sentía su respiración en la nuca.
   -Yo te llevare.-Me dijo una voz dulce al oído.-Te llevare donde quieras.
   -No hace falta.-Le conteste mientras me daba la vuelta.Nuestros ojos se encontraron.
   Estábamos tan cerca.El corazón me comenzó a latir como un loco.Mi voz temblaba
   por culpa de los nervios.-No quiero molestarte mas.Te agradezco todo lo que
   has hecho por mi,pero me la apañare sola.
   -¿Seguro?
   -S.....Si.-Dije casi sin aliento.Él se acercaba cada vez mas.
   -¿Vas a subir?-Pregunto el taxista.
   -No.-Contesto Loke antes de que yo reaccionara.-Puede irse.
   -¿Qué?¡No!¿Qué has hecho?Era el único taxi.
   -Yo te llevare.
   -¡NO!
   -Lo siento mucho,venga ahora sube al coche te llevare.
   -¿De qué vas?
   -¿No lo sabes?Soy tu acosador.
   -¿Te falta un tornillo o qué te pasa?
   -No.
   -Entonces,¿qué te pasa?
   -Pues pasa que...-Se detuvo un instante,me agarro de la barbilla y me beso.-...me gustas.
   Me quede helada.De piedra.Estupefacta.No podía reaccionar.Nunca antes,ningún chico
   me dijo eso.Es una experiencia nueva para mi.
   -Ahora sube al coche,iremos a dar un paseo.-Dijo tirando de mi hacia el coche.
   -¿Por qué?-Pregunte con voz entrecortada.
   -¿Qué?
   -¿Por qué te gusto?
   -Porque he descubierto que no puedo estar sin ti.Siempre pienso en ti.
   -¿Quién eres?-Le pregunte mientras aun estaba en trance.
   -Ya te lo he dicho.A partir de hoy soy tu acosador.

Capítulo 7

         -Se puede saber en que estabas pensando.-Dijo Rachel enfadada.
         -Lo siento.
         -Estaba muy preocupada.
         -Lo se.Lo siento.
         -¿En qué estabas pensando?
         -Toma.-Le dije mientras le extendí el pequeño regalo que le había comprado.
         -¿Qué es?
         -Ábrelo y mira.
         Al verlo se le llenaron los ojos de  lagrimas.
         -Feliz cumpleaños Rachel.
         En ese mismo instante se abalanzo sobre mi tirándome al suelo.No dejo de
         darme besos.Estaba muy contenta.Estaba emocionada,pero sobre todo,
         estaba sonriendo.Mi regalo había cumplido su misión.Hacer que mi hermana
         volviera a sonreír,como lo hacia antes.
         -¡Gracias!Es precioso.
         -Me alegro de que te haya gustado.
         -Mañana hablaremos.Vete a dormir.-Dijo Rachel con una sonrisa.
         -Buenas noches.-Le dije después de darle un beso en la mejilla.
         En cuanto me encerré en mi habitación me sentí aliviada.Por fin estaba
         a salvo de verdad.Entre el acosador,el supuesto salvador,y la bronca
         que me iba a echar mi hermana el día siguiente,mi habitación me parecía
         una pequeña prisión en la que podía encerrarme y esconderme de todo y
         de todos.Aun no compredia del todo quien era ese chico que me salvo
         Que fue lo que paso en el callejón con el acosador.
         -Necesito dormir.-Me dije a mi misma.
         Eran las nueve de la mañana.Me vestí e intente salir de casa sin que se
         enterara mi hermana,pero fue en vano.Rachel era tan sigilosa que no la oí
         cuando salió de su habitación.
         -¿Dónde vas?.
         -¿De paseo?-Dije yo sobresaltada.
         -Prueba con otra cosa-Dijo Rachel.
         -He quedado.Tengo que irme.
         -¿Con quién has quedado?
         -No hace falta que me regañes.Te prometo que no volverá a suceder.
         -Esta bien.Confiare en ti.
         -Gracias.Te quiero.Eres la mejor hermana del mundo.
         -Dime algo que no sepa ya.-Dijo Rachel enseñándome su hermosa sonrisa.
         -Adiós.-Le dije mientras salia por la puerta.
         Solo quera un momento de tranquilidad.Para poder procesar todo lo que
         había pasado.Pero mi momento de soledad duro demasiado poco.Nada
         mas salir por la puerta vi a Loke en la calle de enfrente.
         -¡OH!¡Venga ya!.
         Me puse la capucha de la sudadera intentando esconderme o que él
         pensara que era mi hermana la que salia.No funciono.En cuanto empece
         a caminar el cruzo la calle y en menos de diez segundos le tenia delante.
         Intente escabullirme pero fue en vano.Me pillo.
         -¿Dónde vas tan temprano?-Pregunto.
         -¿Qué haces en frente de mi casa?-Le pregunte.
         -Yo he preguntado primero.
         -No te importa.Es personal.¿Qué haces aquí?
         -He venido a recogerte.
         -¿Para?
         -Sorpresa,sorpresa.
         -No voy a ir contigo.
         -¿Por qué?
         -No se quien eres.
         -Por eso vamos a ir a un lugar a conocernos mejor.
         -¿Qué?¿Cómo una cita?
         -Si,una cita.
         -Haber que me lo pienso.Hmmm....¡NO!
         En cuanto intente caminar me cogió del brazo y tiro de mi hacia el coche.
         Fue muy inesperado.No sabia a donde me llevaría.A saber lo que le estaría
         pasando por la cabeza en aquel momento.
         -Tranquila no vamos a hacer nada raro.-Dijo con una sonrisa.
         -¡¿Qué?!
         Me miro,y comenzó a burlarse de mi reacción hacia lo que había dicho.No
         tenia ninguna gracia,pero le deje burlarse de mi porque era tan mono
         cuando sonreía.

Capítulo 6

            Eran las tres de la madrugada cuando sonó mi móvil.Era mi hermana.Se me olvido
      por completo llamarla.Estaría muy preocupada.
      -Diga-Conteste.
      -Karen,¿dónde estas?
      -En Chain.-Dije yo susurrando para no despertar a mi salvador.
      -¿Qué haces ahí?¿Y por qué susurras?
      -Estoy en casa de una amiga.Y susurro porque no quiero despertarla.
      -Podrías haberme avisado.-Dijo Rachel muy enfadada.
      -Lo se,lo siento,se me olvido.
      -¿Cómo?-Preguntó Rachel confusa.
      -Lo siento iré a casa ahora mismo.
      No me dio tiempo a decir nada mas.Me había colgado.La bronca que me esperaba
      en casa era monumental.Salí de la cama despacio sin hacer ruido.Me puse la chaqueta,
      cogí los zapatos y salí de la habitación intentando que Loke no se despertara.Cuando
      llegué a la puerta principal me acorde de que la había cerrado con llave.
      -¡Joder!-Dije en voz baja.Volví a la habitación para buscar la llave.Busque en todos
      los cajones pero nada.-¿Dónde estará la maldita llave?-Me pregunte a mi misma.
      -¿A dónde quieres ir?-Pregunto Loke.
      -Mi hermana me ha llamado muy preocupada,me voy dame la llave para poder salir.
      -No-Dijo sonriendo.
      -¿Qué?¿De qué vas?
      -Si te la doy,quiero algo a cambio.
      -¿Qué quieres?-le dije en un tono mas enfadada.
      -Quiero que vuelvas.
      -¿Perdón?
      -Que vuelvas por aquí a verme.
      -Si,si,lo que tu digas.Volveré a verte pero dame la llave.
      Se levantó,se puso una camiseta que se le ceñía al cuerpo,¡Dios que cuerpo!,se
      puso los zapatos,cogió una cazadora y abrió la puerta.Me hizo una señal indicándome
      que saliese.
      -Gracias.-Le dije sonriendo.
      El me devolvió la sonrisa.Salió del piso y cerro la puerta.
      -¿Te vas?-Le pregunte.
      -Si.
      -¿Dónde?Es muy tarde.
      -Por eso voy a acompañarte hasta casa.
      -No hace falta,de verdad.
      -Lo que tu digas,pero ya no hay trenes ni autobuses.¿Vas a irte andando?
      -Cogeré un taxi.
      Llamó al ascensor.Esperamos un minuto muy incomodo en silencio hasta que subió.
      Apretó el botón de bajo.No dijimos nada ninguno de nosotros.Yo no sabia que decir,
      y él estaba medio dormido.Cuando se abrieron las puertas del ascensor estaba todo
      muy oscuro.No era el portal.
      -¿Dónde estamos?
      Él no dijo nada,se limito a andar.
      -Te he hecho una pregunta.
      -En el garaje.-contestó finalmente.
      -Si estas cansado no hace falta que me lleves,vuelve a dormirte.
      -No.-Dijo mientras sacaba unas llaves del bolsillo del pantalón.
      Se acercó a un Ferrari enzo de color negro.-Sube.
      Estaba anonadada.
      -Ya me imaginaba que eras un niño rico y mimado.-Le dije mientras subía al coche.
      -No te equivoques.-Dijo,mientras arrancó el motor.-Soy el hijo de un rico asqueroso
      que dejó embarazada a su amante.
      -Lo siento.
      -¿Por qué?
      -No quería ofenderte.
      -No lo has hecho.-Dijo sonriéndome.-Ponte el cinturón.
      Justo después el coche salió disparado hacia la salida del garaje.Las calles estaban
      desiertas,no había ningún alma.
      -Mas despacio.-Le dije aferrándome al cinturón de seguridad con todas mis fuerzas.
      -¿Tienes miedo?
      -No-Le mentí.
      -Relájate llegaremos a tu casa enseguida.
      -¿Sabes dónde vivo?
      No hubo respuesta verbal,pero acelero bruscamente.
      -Me lo tomare como un si-Le dije.
      Tuvo razón,en menos de diez minutos estuvimos en frente de mi casa.Ni siquiera tuve
       tiempo de admirar la ciudad,ya que de noche es maravillosa.
      -Gracias por traerme.-Le dije desabrochándome el cinturón
      Él no dijo nada.
      -Bueno pues hasta otra.-Le dije mientras intentaba abrir la puerta del coche,pero fue
      inútil.Estaba cerrada.-¡Venga ya!¿Te burlas de mi?
      -No.
      -Entonces abre la puerta.
      -No.
      -Ahora la pregunta tonta.¿Por qué?
      -No me has dado un beso de despedida.
      -¿En serio?
      -Si.-Dijo y tiro de mi hacia él haciendo que sus labios tocaran mi frente.Era tan suave,
      y cálido.-No era tan difícil,¿ves?
      -¿Me puedo ir ya?-Pregunte con la voz entrecortada.
      -Claro.Hasta mañana.
      Me baje del coche.Le vi perderse en la oscuridad de la noche.No le conocía pero
      habría preferido que se quedara porque así me protegería de la bronca que me iba
      echar mi hermana en cuanto entrara por la puerta.
     

Capítulo 5

                     El olor a comida me despertó.Me incorpore lentamente a lo que yo creía
            que era mi habitación.La luz de la luna iluminaban la habitación de grandes ventanas.
            Me levante de la cama y admire el paisaje. Según mis cálculos,estábamos en el piso
            treinta.Se podía ver toda la ciudad.Era precioso.Un ruido en la otra habitación me
            hizo regresar a la realidad.¿Dónde estaba?Segundos después me llegaron a la
            memoria fragmentos de lo que había pasado en el callejón.
            -¿Qué a pasado?-Me pregunte a mi misma mientras buscaba una forma de escapar.
            Busque en todos lo cajones de la mesilla de noche para encontrar alguna pista,
            algo que me dijera donde estoy.-¡BINGO!-dije mienta sacaba del cajón una
            USP Compact.Mire a ver si estaba cargada otra vez la suerte estaba de mi lado.
            Había cuatro balas en el cargador.No importaba donde estaba solo quería salir.
            Abrí la puerta sin hacer ruido.Vi a un chico alto y grande de pelo negro.Mientas
            estaba distraído en la cocina decidí salir de ahí sin hacer ruido.
            -Veo que ya te has despertado.
            Instintivamente le apunte con la pistola.Como es posible que me haya oído si no
            he hecho ruido.
            -¿Dónde estoy?
            -En mi casa.Ven te he preparado algo de comer.-Dijo mientras se acercaba a mi
            muy lentamente.
            -No te muevas-Le dije intentando parecer firme aunque se notaba mucho que me
            temblaba la voz.-Esta cargada.
            -Lo se-Dijo con tranquilidad.Pero no paro de caminar hacia mi.
            -He dicho que no te muevas.Tengo buena puntería.No voy a fallar.
            -Lo se.
            -¿Es que quieres morir?¡¡No te muevas!!-dije casi sin voz.
            Estaba muy asustada yo daba pasos hacia atrás mientras él daba pasos hacia mi.
            Como no miraba por donde iba me tropecé con una silla.Solté el arma para
            amortiguar la caída con las manos,pero no me hizo falta.El chico estaba ya
            bastante cerca de mi y me agarró.Tiro de mi hacia él con fuerza pero sin
            hacerme daño.Era delicado y fino.
            -¿Estas bien?-Pregunto mientras acerco su mano a mi frente.Yo no dije nada,
            intentaba soltarme de sus manos pero no podía,no tenia fuerzas para ello.-Todavía
            tienes un poco de fiebre.
            -¿Quién eres?
            -Seguramente tengas hambre.-Dijo mientras me cogía en brazos y me llevo hasta
            la cocina.-Siéntate y come
            -No voy a comer.-Le dije empujando el cuenco de sopa.
            -¿Por qué?-Pregunto sorprendido.
            -¿Quién eres?
            -Si comes te lo diré.
            -Me estas tomando el pelo.Ja..Ja.
            -Si comes te diré todo lo que quieras saber.
            -Muy bien,empieza tu.Dime tu nombre.
            -Me llamo Loke.
            -Que nombre mas raro.
            -Cumple tu palabra.Come.
            -Esta bien-Dije mientras cogía la cuchara.Al probar la comida me quede de piedra.
            Estaba riquísimo.-Cocinas bien.-Le dije después de acabarme el cuenco.
            -Gracias-Respondió con una sonrisa.
            -Ahora te toca responder a mis preguntas.
            -Que quieres saber.
            -¿Eres el que me ayudo en el callejón?
            -Si.
            -¿Por qué?
            -Porque necesitabas ayuda.
            -¿Cómo he llegado hasta aquí?
            -Te desmayaste.No iba a dejarte allí tirada.
            -¿Cuántos años tienes?
            -19
            -¿Y?....
            -Haces muchas preguntas.Estoy cansado.Te parece si seguimos mañana.-Dijo
            mientras se levantaba de la silla.
            -La ultima. Por favor.
            -Te escucho.
            -¿Estamos lejos del callejón?
            -Si.Porque preguntas.
            -Para saber cuanto tardare en llegar a casa.
            El chico se hecho a reír.No lo entendí hasta que cerro la puerta con llave.Se acerco a
            mi de nuevo y me cogió en brazos.
            -Pero,¿qué haces?-Le pregunte.
            -Llevarte a la cama.
            Sentí como me ruborizaba,el se dio cuenta y se hecho a reír otra vez.Abrió la
            puerta del dormitorio y me dejo caer en la cama.
            -Duerme mañana te llevare a casa.-Dijo mientras se quitaba la camiseta-Voy
            a ducharme.
            No pude dormirme.Miraba de reojo la puerta de la ducha.¿Quién era ese tio?
            La puerta del baño se abrió y de allí salio un chico moreno de ojos verdes,con
            músculos y mojado.Era muy guapo.Pero el corazón empezó a latir cuando
            se metió en la cama conmigo.
            -¿Qué haces?-Le pregunte.
            -Meterme en la cama.
            -Vale.Entonces si tu duermes aquí,¿dónde duermo yo?
            -Aquí.-Dijo mientras daba palmaditas en la cama.
            -Mejor duermo en el sofá.
            -¿Tienes miedo?-Pregunto con una sonrisa.
            -Si.-Respondí.
            -Relajante.No voy a hacerte nada.-Dijo mientras tiro de mi y me volvió a tumbar
            en la cama.Me había puesto roja como un tomate,menos mal que estaba oscuro,
            y no se veía casi nada.Tiro de mi hacia él hasta que estuvimos pegados.Sentía su
            aliento en la nuca.-No va a pasarte nada.Duerme tranquila.A partir de hoy te
            protegeré,te lo prometo.-Dijo en voz baja.Me sentí aliviada instantáneamente.
            Me sentía segura,sabia que nada malo podría ocurrir.Él se quedó dormido
            enseguida,a los pocos minutos yo también me había dormido en sus brazos.
                       

Capítulo 4

             
                 Es increíble lo retorcida que puede llegar a ser la mente humana.Estoy asustada.
           Tengo miedo a morir,y no solo eso tengo miedo de que mi hermana muera también.
           No quiero perder a la única familia que me queda.Por eso he tomado una decisión.
           Voy a hacer lo que Kilian me pide.Voy a convertirme en una asesina solo para que
           no destruya mas vidas como ha echo con la mía. Rachel no estaría de acuerdo pero
           es la única solución ya que no tengo tiempo de arriesgarme a robar la cura.Se que va
           a ser duro someterse a las ordenes de alguien a quien odias pero es por no ver a mi
           hermana triste.No quiero que sufra mas.Mañana sera su cumpleaños y yo aun no
           le he comprado un regalo.No se que puedo darle para hacer que vuelva a sonreír
           para mi.Creo que una bola de nieve con fotos le recordara los buenos tiempos
           que pasamos cuando estábamos todos.
           Baje las escaleras para decirle a Rachel que iba a salir pero no estaba en casa.
           En la mesa del salón había una nota que explicaba el plato lleno de comida.
           Me sorprendió que ella se fuera sin decirme nada. Abra ido a hacer algún recado.
           Como lo mio es una sorpresa no le digo donde voy pero le dejo una nota en el
           mismo sitio avisando la de que voy a salir y de que voy a llegar tarde.
           Cogí una sudadera del armario,el móvil,los cascos,las llaves y salí.
           Antes de salir del portal conecte los cascos y puse música para distraerme.
           Por nuestro barrio no hay muchas tiendas así que me toca ir en tren hasta el centro.
           Me encanta ir en tren.Se ven muchas caras interesantes.A veces les tengo envidia,
           porque viven sin saber lo que les rodea.Viven sin saber que por culpa de un loco
           como Kilian sus vidas cambiaran dramáticamente.Viven sin temor,por eso les
           envidio.De momento tengo un buen día.Dos estaciones mas tarde se sube al
           tren una cara conocida.Es el chico del gimnasio.Leva los cascos puestos,así que
           supongo que no se a percatado de mi presencia.Pero de que hablo si ni siquiera
           se fijo en mi en el gimnasio,como iba a mirarme si no me conoce.A veces soy
           una tonta.El chico que se sienta delante mio me empieza a hacer caras.Me
           manda besos y me hace señas.Yo intento ignorarlo,pero en cuanto se libera
           un sitio a mi lado él lo ocupa.Instintivamente yo me levanto y me voy porque
           me acerco a mi parada,pero el también se levanta y me sigue.A dos manzanas
           de la estación de tren esta la tienda de regalos.Le pido a la encargada que me
           traiga algunos modelos,mientras yo busco dos fotos para ponerlas.La
           melancolía me invade cuando veo una foto de las dos cuando eramos
           pequeñas.
           -Bien señorita,¿cuál le gusta más?-Me pregunto la encargada enseñándome
           cuatro modelos diferentes.
           -Este-Digo yo señalando uno bastante simple.
           -¿Qué fotos quiere ponerle?
           -Estas dos-Le dije mientras se las enviaba vía bluetooth.
           -De acuerdo,espere cinco minutos por favor.
           -Esta bien,gracias.
           Mientras esperaba me di la vuelta y para mi sorpresa el tipo que me estaba
           acosando en el tren me estaba esperando fuera.Estaba asustada.Y si me
           seguía hasta casa. Pensé en un modo de librarme de él y solo se me ocurrió
           uno.Me acorde que dos manzanas más arriba había un callejón oscuro
           que daba a ninguna parte.Se me ocurrió practicar con el lo de la venganza
           de Kilian. Soy bastante buena peleando y según lo veo le ganare bastante
           rápido.
           -¿Lo quiere para regalo?-Me preguntó la encargada de la tienda.
           -Si por favor.
           La chica era bastante hábil con las manos,en menos de un minuto lo tuvo
           envuelto,metido en una caja,con un lazo y una tarjeta de felicitación.
           -Aquí tiene.
           -¿Cuánto es?
           -Son 28,95$
           Saque el móvil,le quite la carcasa y le di a la chica un billete de veinte y uno
           de diez.
           -Aquí tiene su cambio.Muchas gracias.Vuelva pronto.-Dijo mientras me daba
           la bolsa con el regalo.
           Al salir de la tienda me dirigí hacia el callejón.Como era de esperar el chico
           me siguió.Saque la pequeña caja con el regalo de Rachel de la bolsa y lo
           metí en el bolsillo de la sudadera.Tire la bolsa,me remangue las mangas y
           me metí en el callejón.Como era ya de noche y era oscuro ,la sudadera negra,
           y mi pelo negro me ayudaron a camuflarme en la oscuridad,para atacarle
           por detrás.
           -Así que quieres jugar-Dijo él riéndose e intentando encontrarme en la
           oscuridad.Pasaron treinta segundos y yo no dije nada.-Con que no
           quieres hablar conmigo.¡¡Oh!!Eso me duele.Si yo soy muy simpático.
           Venga amos a jugar juntos.
           Sin hacer mucho caso a lo que él decía espere mi oportunidad de
           abalanzarme sobre él.Pero me vio venir y entonces todo cambió,porque
           no iba a pegarle yo a él sin que era al revés.
           -Me avisaron de que harías esto.
           -¿Quién te aviso?-Pegunte yo sorprendida por lo que había dicho.
           -Eso no importa.Veo que tenía razón,eres muy interesante.
           La fuerza con la cual me estaba sujetando contra el suelo era cada vez
           más grande.
           -¿Qué quieres?-Le pregunte yo intentando soltarme.
           -Ya te lo he dicho.Solo quiero jugar contigo.-Dijo mientras metía una
           mano debajo de mi sudadera.
           -Suéltala-Dijo una voz masculina.-Juega con otra,ella es mía.
           Estaba sorprendida desde cuando era un objeto.Pero estaba aliviada
           porque el otro chico estaba dispuesto a ayudarme.Se acercó despacio,
           le dio una patada al que estaba encima mía.Me agarro del brazo,me levantó,
           me puso la capucha y tiro de mi hacia él.Sacó una pistola e disparo al otro
           chico.Quise darme la vuelta y ver si lo había matado o no pero
           me lo impidió.
           -Vamos.-Dijo tirando de mi sin darme tiempo a reaccionar.

           
           

         

Capítulo 3

              Me sentía alagada.Aun mantengo mis encantos.Sigo atrayendo a los chicos.
          La verdad es que Rachel tenia razón,el chico era bastante guapo aunque no
          creo que él se haya fijado en mi.En este momento mi prioridad no es encontrar
          un chico sino encontrar la cura.De no haber sido por Kilian,ya le habría pedido
          su número,ahora estaríamos en una cita en el parque de atracciones o cosas
          parecidas.Cada vez que pienso en como me engaño me cabreo porque me doy
          cuenta de lo estúpida e imbécil que fui al creer en su palabra.Me siento humillada,
          triste y hundida. Conocí a Kilian hace un año.Iba conmigo a clases de judo. Era un
          chico tímido,no hablaba con nadie.Tenia el pelo corto,y unos ojos negros como la
          noche. Parecía el típico niño que estudiaba y que sacaba buenas notas al que todos
          odiaban.Me dio pena que siempre estuviese solo así que me hice su amiga.Al
          principio fue todo normal pero con el tiempo cambio.Simplemente se volvió loco.
          Dejo de venir a clase,se encerraba en su habitación haciendo experimentos.
          Cuando averigüe lo que estaba haciendo fue cuando me infecto.Estaba  creando
          un virus capaz de matarte sin ser descubierto por los médicos. Había hecho
          experimentos con humanos,los estaba matando solo para encontrar una forma
          de vengarse de aquellos que le habían humillado en el pasado.El lo llamaba la
          droga,ya que se podía ingerir de la misma manera que las drogas reales.
          El virus podía ser esnifado,inyectado y todo sin saber que dentro de un mes te
          morirías.Al decirle que iba a ir a la policía para decirles lo que estaba haciendo,
          se abalanzó sobre mi.Al tener mas fuerza que yo me pudo sujetar para que no me
          fuese.De un golpe en la cabeza me dejó inconsciente.Cuando me desperté estaba
          atada a una silla.Él estaba sentado delante mio sonriendo.
          -Ahora ya no puedes decírselo a la policía.-Dijo mientras me acariciaba la mejilla.
          -Estas loco, iré aunque sea lo ultimo que haga.
          -No lo creo,porque si vas me meterán en prisión.
          -Es lo que te mereces.
          -Ya pero tu morirás si yo no te doy la cura.
          -¿Qué cura?
          -Ahora estas infectada con el virus,eres débil por lo tanto morirás en un mes
            aproximadamente.
          -¡¿Qué?!
          -Ya me has oído, morirás si no te doy la cura pero podría dártela si me haces unos
            pequeños favores.
          -¿Qué favores?
          -Matar a todos estos  cabrones.-Dijo mientras me enseñaba una lista con unos
            veinte nombres.
          -No voy a matar a nadie.
          -Karen cariño, piénsalo bien soy tu única salvación.
          -Prefiero morir a ser como tu.Ademas porque no les haces ingerir a ellos el virus.
          -Es mas divertido si lo haces tu.-Dijo mientras se acerco a mi para desatarme.-Puedes
           irte pero si cambias de opinión ya sabes donde estoy.Recuerda el tiempo pasa, tic tac,
           tic tac.Solo te quedan treinta días de vida.
          Me quede atónita por lo que había escuchado. Quería convertirme en una asesina.
          Han pasado diez días desde que me infecto y aun no se que hacer,si hacer lo que el
          me pide o intentar robarle la cura.